Oficialía del registro civil de Juchitán, una cloaca de corrupción.
Por Eduardo Cruz Silva / APIM.
Modus operandi Al reportero, le fueron entregados diversos documentos y fotografías de una libreta de raya tipo profesional, en donde los empleados administrativos que semanalmente se van rotando para el cobro de actas de nacimiento, bodas etcétera, van anotando los servicios urgentes o a domicilio, para lo cual ya cuentan con hojas oficiales que adquieren en la recaudación de rentas para el servicio ordinario de 76 pesos y son entregadas en servicios urgentes al costo de 240 pesos. Según se puede establecer, la mecánica de operación es muy simple, cada servicio urgente se va anotando en la mentada libreta y a las arcas estatales solamente se reportan pagos por servicios ordinarios. Cada día se realizan de 20 hasta 30 actas de nacimiento urgentes lo que arroja una diferencia de 164 pesos por acta que no son reportados. La libreta contiene un registro pormenorizado de esos ingresos que son avalados por la titular de la oficialía del registro civil Vieney del Rosario Orozco Jiménez, y en algunos espacios hasta se señala el monto del porcentaje que le corresponde a los involucrados. Los denunciantes estimaron que por concepto de actas de nacimiento urgentes, le roban al gobierno del estado de 20 a 40 mil pesos mensualmente y en temporadas de alta demanda más del doble. Otro rubro que se ha convertido en un jugoso negocio, es la celebración de bodas pues casi todas ellas se realizan en domicilios particulares a un costo de 3 mil pesos y se entregan recibos como si fueran realizadas en las oficinas a un costo de 840 pesos, la diferencia de ese ingreso va a parar directamente al bolsillo de la oficial del registro civil antes señalada y del ayudante en turno que le acompaña en el protocolo del enlace matrimonial. De acuerdo con la información proporcionada, en el pasado mes de diciembre se realizaron más de 100 bodas por lo civil, de las cuales 84 fueron en el domicilio de los contrayentes, curiosamente según los folios de hojas que fueron utilizados el registro del matrimonio todas fueron ellas quedaron asentadas como bodas realizadas en las oficinas, por lo que se estima que tan sólo en ese mes Orozco Jiménez, se embolsó más de 150 mil pesos. Los denunciantes, señalaron que otro de los involucrados en “el negocio” es el responsable de la oficina de recaudación de rentas de Juchitán, Ulice Antonio Altamirano, pues además del contubernio entre ambos, se les ha visto en situaciones comprometedoras en las propias oficinas del registro civil. La libreta de las transas De acuerdo con la documentación entregada al reportero, cada uno de los empleados administrativos que se encuentran coludidos con la oficial del registro civil tiene la obligación de ir anotando el número de los folios que representan los cobros ilícitos, libreta que al termino de labores es guardada a piedra y lodo por otro empleado de nombre Miguel Ángel Pineda, la libreta es usada tanto para controlar los ingresos como para anotar los pagos realizados a los que intervienen en la operación. Agregaron, que tanto Orozco Jiménez como el recaudador de rentas Antonio Altamirano, constantemente hace alarde de su influyentísimo y cuando son visitados por algún superior se dan a la tarea de agasajarlos con regalos comidas o francachelas para no ser molestados. Se señaló finalmente, que hacen uso de la denuncia anónima porque ya han dirigido en varias ocasiones sus quejas la responsable del Registro Civil de Oaxaca, Clarivel Constanza Rivera Castillo, por el maltrato que sufre el personal que no se repliega a los caprichos de Orozco Jiménez, pero hasta ahora no se les ha tomado en cuenta, pese a lo escandaloso del robo que se está cometiendo en perjuicio de las arcas estatales.
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